El aceite del automóvil es un componente esencial que todos los vehículos requieren, y su función es de suma importancia.
Su principal tarea es reducir la fricción entre las partes móviles del motor, lo que evita el desgaste prematuro de estas piezas debido al rozamiento.
No obstante, su utilidad va más allá. El aceite del motor también contribuye a la refrigeración, evitando que la temperatura aumente debido a la fricción, y previene la corrosión, además de mantener en suspensión los residuos atrapados en el filtro.
En resumen, el aceite del motor desempeña diversas funciones cruciales para el correcto funcionamiento del vehículo. A pesar de ello, es un componente que se consume con el tiempo y, por tanto, requiere un cambio periódico.
¿Cuándo se debe cambiar el aceite del motor?
Cada fabricante establece pautas sobre cuándo es necesario realizar este cambio. En promedio, se recomienda hacerlo cada 15,000 a 30,000 kilómetros.
Sin embargo, este intervalo puede variar según la frecuencia y el tipo de conducción. Por lo general, se sugiere cambiarlo cada uno o dos años.
La antigüedad del vehículo también influye, ya que los coches más antiguos suelen requerir cambios más frecuentes debido al uso de compuestos de base mineral con menor durabilidad.
Además de seguir estas recomendaciones, es importante estar atento al rendimiento del vehículo y a señales que indiquen la necesidad de un cambio de aceite. Algunas de estas señales incluyen:
- Ruidos inusuales en el motor, especialmente al acelerar, que pueden indicar falta de lubricación adecuada.
- Olor a aceite dentro del vehículo, que puede ser causado por fugas o recalentamiento del motor.
- Escape de gases oscuros, que puede ser resultado de la pérdida de viscosidad debido a la falta de aceite.
- Advertencias en el tablero de instrumentos sobre niveles bajos de aceite.
En cuanto al costo de cambiar el aceite del coche, es una operación relativamente económica.
El precio puede variar según el tipo de aceite recomendado por el fabricante y el taller donde se realice el cambio. En general, el costo total, que incluye recursos, materiales y mano de obra, suele oscilar entre 90 y 100 euros.